[dejemos que el amor gane]
la primera vez que se cruzaron sus miradas fue con cierto recelo, desconfianza y hasta con odio, con esa saña histórica, heredada de una guerra que terminó hace 22 años, esa separación ideológica que corta a la mitad de El Salvador entre buenos y malos porque no compartís lo que yo pienso.
la segunda vez fue diferente, se reconocieron como humanos, sin ver las camisetas.
con la tercera y la cuarta, con la quinta y la sexta el panorama iba cambiando. ya se reían. ya había entre ellos miradas cómplices. para el almuerzo se sentaron de espaldas, pero secretamente se tocaban: espalda con espalda, el pelo de ella sobre él y hasta un juego de dedos traviesos.
antes del cierre del centro de votación, huyeron. dejaron todo tirado.
mientras en la calle, la gente peleaba, el tribunal contaba y los partidos celebraban; ellos también festejaban como si el mundo se iba a acabar. se rindieron el uno al otro, con entrega absoluta, con pasión, porque en la cama las ideologías no caben.
la segunda vez fue diferente, se reconocieron como humanos, sin ver las camisetas.
con la tercera y la cuarta, con la quinta y la sexta el panorama iba cambiando. ya se reían. ya había entre ellos miradas cómplices. para el almuerzo se sentaron de espaldas, pero secretamente se tocaban: espalda con espalda, el pelo de ella sobre él y hasta un juego de dedos traviesos.
antes del cierre del centro de votación, huyeron. dejaron todo tirado.
mientras en la calle, la gente peleaba, el tribunal contaba y los partidos celebraban; ellos también festejaban como si el mundo se iba a acabar. se rindieron el uno al otro, con entrega absoluta, con pasión, porque en la cama las ideologías no caben.
Cursi :')
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