[los 31 en mundos paralelos]
quizá en algún universo paralelo yo estaría casado y con hijos, pagando una hipóteca, construyendo "el futuro". quizá me levantara todas las mañanas a pasear al perro, a ayudar para que los niños lleguen a tiempo al colegio... quizá sería mujer y ya estuviera casada y/o con hijos.
quizá viviría en un país desarrollado y me quejaría de las estaciones. quizá viviría en uno menos desarrollado y no tendría ni siquiera este blog.
quizá sería moreno, pelo liso, ojos verdes o azules o negros azabache, rubio intenso o negro, más gordo o más flaco, o más fornido, más alto o más bajo.
quizá tendría mala ortografía, no pudiera leer, odiaría el cine y la foto. tomaría más o menos. reiría más o menos, o bien lloraría un poquito más o un poco menos.
quizá en otro mundo trabajaría de contador, llenando con parsimonia esos grandes libros. sería un auditor con bigote y calcetines blancos con mocasines. quizá sería un modelo o un actor superfamoso, incluso futbolista o diputado. quizá sería astronauta, chef, domador de tigres, torero, marinero o pirata, zapatero, sastre, relojero, cirquero, trapecista, gimnasta, maestro chocolatero... no sé, quizá.
pero en este mundo de continuaciones absurdas y sueños aún más, así como soy, como me he configurado y me han codificado, así, a los 31, hoy por hoy soy feliz.
quizá viviría en un país desarrollado y me quejaría de las estaciones. quizá viviría en uno menos desarrollado y no tendría ni siquiera este blog.
quizá sería moreno, pelo liso, ojos verdes o azules o negros azabache, rubio intenso o negro, más gordo o más flaco, o más fornido, más alto o más bajo.
quizá tendría mala ortografía, no pudiera leer, odiaría el cine y la foto. tomaría más o menos. reiría más o menos, o bien lloraría un poquito más o un poco menos.
quizá en otro mundo trabajaría de contador, llenando con parsimonia esos grandes libros. sería un auditor con bigote y calcetines blancos con mocasines. quizá sería un modelo o un actor superfamoso, incluso futbolista o diputado. quizá sería astronauta, chef, domador de tigres, torero, marinero o pirata, zapatero, sastre, relojero, cirquero, trapecista, gimnasta, maestro chocolatero... no sé, quizá.
pero en este mundo de continuaciones absurdas y sueños aún más, así como soy, como me he configurado y me han codificado, así, a los 31, hoy por hoy soy feliz.
Comentarios
Publicar un comentario
y vos ¿qué pensás?