[29 historias de amor: el placebo]

te parecerá extraño que te escriba después de tanto tiempo, pero quería pedirte perdón por todo lo que te he hecho.


no es nada malo. no te preocupés.


simplemente quería decirte que apareciste en el momento justo en que perdía la fe en el amor. mis ilusiones se iban quemando poco a poco y estar con vos fue la dosis para apagar los fuegos y reconstruir los campos.


sí, me enamoré de vos. 
sí, tres días fueron suficientes. 
sí, yo hice el amor con vos.


sí, te agarré como tabla de salvación.


por ejemplo, te hago el amor entre las líneas de mis versos, te arrullo por las noches con canciones francesas cursis que busco en youtube, los domingos caminamos de la mano por el parque, los martes son días de ver películas extranjeras -todas las que me has recomendado-, y los jueves te preparo cenas continentales, porque tampoco te quiero cansar y quitar tiempo, algún otro corazón te puede necesitar y no deseo acapararte solo para mí.


realmente no sufro, realmente no estás ausente. simplemente sos tan real como mis anhelos de encontrar un amor de verdad y vos te le parecés bastante, tenés esos porcentajes exactos de inteligencia, cuerpo, gentileza y cama que yo quiero.  sos como mi paradigma de amor.


de nuevo, perdón por usar tu recuerdo y tu imagen para darle vida a mis sueños. en cuanto llegue el real, los suelto. 


buenas noches, amor.