[le bilan]

no me puedo quejar de 2011 a pesar de que ha sido uno de los años más duros de mi vida.


fue agotador, exhausto y matador. no sé si porque a los 30 se le acaba la garantía a uno y empiezan los achaques de la vida adulta, aunque más bien creo y estoy seguro de que -sumado a la columna de años- la causa se ve directamente relacionada con la manía que tengo de hacer varias actividades al mismo tiempo y a pesar de que no me estreso, llevo al límite las capacidades del cuerpo y sigo metiéndome en más compromisos hasta que este año me dijo mi cuerpo ¡basta!


sin embargo ese mismo momento de replegarse para retomar nuevas fuerzas me ayudó un montón a poner mi vida en perspectiva para poder decir ::soy feliz:: y lo sigo siendo.


2011 me dejó muchas lecciones o al menos recopilé mucha sabiduría de aquí, de allá, de aquel lado... primero no hay que hablar mal de los ex, porque uno nunca sabe, si con nosotros no resultó, puede ser que a otra persona le vaya mejor, es como el champú el amor al final. así que no nos aferramos que este es porque sabemos y se nota en el pelo que no nos está cayendo bien.


la felicidad es una decisión, todo depende del ojo con el que veamos las cosas. es decir, si viene algo que creemos que es malo, puede ser aprendizaje, si nos caemos, levantémonos, así de simple. si ese champú no nos hace bien, cambiemos de champú porque por más que hagamos no va a cambiar. si no nos gusta el trabajo, busquemos otro y cuando lo tengamos zaz, nos vamos. si no me gusta lo que estoy estudiando, busco otra carrera. la vida solo es una y hay que buscar vivir de la mejor manera, no sobrevivir.


son decisiones difíciles al fin y al cabo, y hay que tener coraje para hacerlo, respirar y tirarnos a lo desconocido.


para ser felices hay que ser egoístas, nadie más va a luchar por nuestra felicidad y tampoco hay que conformarnos, nos merecemos lo mejor y nadie puede decir lo contrario. pero para merecerlo y conseguirlo debemos poner de nuestra parte. más acción y menos palabras. 


otro punto: cómo podemos ofrecerle felicidad a alguien si nosotros no somos felices. cómo vamos a tener confianza en alguien si no nos tenemos confianza a nosotros mismos, si creemos que va a venir alguien mejor que nosotros y se lo va a llevar. cómo vamos a tener seguridad si no creemos en nuestras virtudes. en resumen, no podemos ofrecer algo que no tenemos.


saliéndonos de las lecciones, lo que más me agradó de este año fue conocer gente de calidad extraordinaria, amigas y amigos que regresaron, nuevos lazos entreñables, mi corazón se hizo máaas grande, hay más espacio para las nuevas amistades.


realmente no me quejo porque fue duro, pero bien vivido y abrazado. 


para este 2012 no espero más que sorpresas absurdas...