Guardando promesas...

Me he prometido a mí mismo: "Mí mismo, ya no más versos para MT2"

Qué difícil es mantener la promesa porque precisamente hoy te tengo tantas ganas que mi mano tiembla y mi cerebro se bloquea para no encontrarte en los recuerdos.

Tengo tantas ganas de acariciarte con las sílabas, de darte un beso con las onomatopeyas, de hacerte muecas con las vocales, de comerte con las oraciones, de exitarte con los párrafos y hacerte el amor con una historia o un poema.

Te tengo tantas ganas que no escribiré más para no romper la promesa, aunque técnicamente quizá se mantenga...

Comentarios

Entradas populares